Desarrollo
La luz es la voz de lo eterno. Lo eterno es el ave escapada del tiempo. El tiempo es la casa donde amanece la historia. La historia es mujer que presume de sus trajes de variables colores y los colores son a su vez, casa de espejos, salmodia de vuelo eterno, la diáspora amanecida de la luz; tal vez intuyendo esa magia acendrada de la luz y el color es que durante siglos algunos colombinos han asumido el destino de crear sueños y evocar visiones entre pinceles y lienzos.
Durante sus primeros cincuenta años, Colón no tuvo otra cosa que música y artes escénicas, además de visitas esporádicas de compañías de teatro que ofrecían tournée en la rica comarca, como en otros sitios da la Isla.
En 1886 llega la familia Béjar a Colón, esta familia forma parte del grupo primigenio de personas cultas vinculadas a la pintura.
De la familia Fontanilles-Béjar dos miembros traen inclinaciones artísticas: Concepción y su hermano Pablo (1869-1920) la primera dominaba con mucha habilidad el creyón y Pablo escribiente del municipio con menos de veinte años y algunos cuadros hechos, por las aptitudes demostradas recibe ayuda económica de dicho organismo para perfeccionar sus conocimientos en España con los maestros de allá.
Pablo Antonio Béjar (1869-1920) desarrolla una importante etapa formativa que lo convertirá, a principios de siglo, en el pintor favorito de las cortes españolas e inglesa. Allí retrata a las grandes damas con pamela, modelos pintados con tanto virtuosismo colorista que hacen de su arte un estilo inconfundible, muy solicitado por su ajustada técnica al pastel y al óleo.
La relación del artista con nuestro pueblo fue esencialmente afectiva, aquí solo encentró buen trato, cariño y comprensión. El elemento español tan fuerte en esta zona costeó sus estudios que se revirtieron en valiosos lienzos españoles e ingleses. Se casó con la colombina Celia López de Armas y este lo anudó más sentimentalmente a Colón, pero sólo eso.
Si Pablo y Concepción son los primeros aficionados a la plástica, que recoge la historia de la localidad, aunque no nacidos en Colón; de la unión matrimonial de Concepción y el comerciante español (montañés) Manuel Mantilla avecindado en el pueblo, vienen al mundo cuatro descendientes, uno de los cuales será años más tarde el renombrado Manuel Mantilla Béjar (1892-1967), que muy a diferencia de su madre y tío, nace que nacen en Barcelona es colombino de nacimiento.
Por las características de su vida ulterior Manuel Mantilla merece más atención desde el punto de vista biográfico y artístico que su tío Pablo Béjar que es un pintor español.
Manuel Mantilla estuvo en la academia San Alejandro donde no culminó estudios, pero si aprovechó el aprendizaje. Manifestándose como un caso de precocidad y colisión del talento tempranamente. En sus años en la academia cubana era el preferido de Leopoldo Romañach y se esperaba de él algo distinto, un soplo renovador entre tantas fórmulas académicas, desgastadas y rutinarias. Mantilla hizo alguna obra de tema nacional, el archiconocido haciendo patria, lienzo enorme, renacentista que por sus dimensiones fue laureado por la academia de Artes y Letras en 1912, y utilizado como portada de bohemia, según se conoció, hasta poder apreciar el original, impresionante, en la galería de arte del municipio.
Haciendo patria es un estudio al natural del campo cubano, con un asunto muy simple, las labores de un campesino en su medio. El dibujo de la recia figura y los animales matizados con una gama colorística de verdes, sienes y carmelitas dan sensación de la naturaleza como algo sobredimensionado, poético.
Como pintor bisoño aún se perciben los empates y la luminosidad cercana a Joaquín Sorolla y al impresionismo español, pero en nada invalidan las reminiscencias mencionadas el dominio de la composición, la solidez del dibujo, el tratamiento libre y desprejuiciado de la figura en primer plano y de su entorno. Su dilatada permanencia en Francia hizo que cortara definitivamente el cordón umbilical que le ataba a la Isla donde nació, convirtiéndose en un desarraigado pintor español-europeo, que principalmente se destacó en el retrato y en el paisaje lírico.
En el devenir del siglo XIX la Isla no presenta un desarrollo notable de las artes plásticas. Los dibujantes foráneos están a la orden perfilando el huidizo rostro del hombre y el campo cubano. Colón, comarca riquísima, llana, fértil, cuada de ingenios azucareros, tuvo sobrados motivos para atraer la mirada de un artista extranjero.
El mayor de los monumentos al descubridor al descubridor en nuestro país, es de gran impacto, claridad y belleza clásica. Con estas obras el primer director cubano de San Alejandro, dio muestra con ejemplar fuerza interpretativa del estado calamitoso en que se hallaba la colonia a fines de siglo.
El advenimiento de la República Neocolonial, en la pintura como en otras ramas de la plástica, en manos de académicos y tradicionalistas se hacía un arte complaciente a una clase hegemónica sin gusto estético verdadero. (Véase anexo # 1)
A principios de siglo, el 6 de febrero de 1904, nace Apolonio Reyes Falero, acaso el más importante de de los pintores colombinos. De muy niño sintió una incontenible necesidad de pintar. Sus trabajos iniciales los realiza de forma autodidacta hasta que en los años veinte, reconocido como una promesa local, decide formalizar una matrícula en la academia de San Alejandro, donde recibe clases y es admitido por Leopoldo Romañach.
Como en ningún otro caso de la pintura cubana, un artista mezcló en su vida la tragedia de la locura con la pasión de pintar. Víctima de trastornos mentales, a veces agresivo, cuando se hallaba bien era alegre y afable, y se dedicaba con su pincel a explorar en los grandes y pequeños temas, ayudado por el dominio que poseía en las técnicas y materiales.
Como era un artista muy bien dotado abundó en los más variados géneros, hizo retratos, paisajes, naturalezas muertas, copias de estampas religiosas, estudios de Goya, Rembrandt, y sobretodo, muchos lienzos por encargo.
Apolonio parte de una visión sencilla de la naturaleza, convencional, pero no hurga, no ahonda. Es un pintor de soledades y silencios y a sus paisajes les falta un toque mayor de calor humano.
Su persona se vio sacudida por padecimientos que lo atormentaron desde la juventud, pero ni aún en tal estado dejó de pintar; narran sus familiares cómo encerrado pintaba las paredes con las eses fecales. Al final de sus días viejo y medio ciego vivió en Colón, adonde siempre volvía como a un remanso.
Un colombino que luchó duramente contra el ambiente tan poco halagüeño para imponerse es Tito Eugenio Freire López (1928) un dibujante consagrado, cuyo arte se derramaba con una espontaneidad admirable. Desde pequeño pinta sobre madera y también hace trabajos de jardinería. A los trece años en 1841 asombró al pueblo con una exposición de cartones humorísticos. Eran quince dibujos sobre gentes conocidas por todos, que arrancaban la risa de sólo verlas. En esta muestra personal Tito demostró sus grandes aptitudes de dibujantes.
Su segunda muestra fue en el Liceo donde impresionó a personas influyentes que promovieron a su favor una campaña en la prensa para ayudarlo. a la capital del país ansiada meta de todo pintor, llega en 1944 a cursar estudios en San Alejandro. En esta época es ya un talento reconocido y comienza a desenvolverse en trabajos relacionados a su ocupación: pintura de íconos y artesanía en mármol. Luego de 1954 sin que se sepa a ciencia cierta por qué el artista y su obra se diluyeron en el oscuro anonimato.
Un poco más acá se encuentra José Carlos Rodríguez González (1926) oriundo de Martí, vivió en colón entre 1935 y 1955 donde desarrolla una extensa obra como pintor, rotulista y caricaturista de fuerte acento expresionista. En 1945 hizo una exposición de cartones en el Liceo. en la etapa prerrevolucionaria trabajó para la compañía Trinidad y hermanos, después del triunfo de enero del 59 se traslada para Los Arabos, donde hace de la pintura un oficio para vivir.
La numeración de nuestros más destacados artistas y artesanos sería inexacta sino es mencionada la labor abnegada y silenciosa de Dolores Muñiz Espinosa (1911) la primera artesana en cuanto a la calidad de su disciplina que son los tejidos y bordados. Especialista en tejer y bordar, Lulú comenzó en 1942 y representa un caso único, aislado, entre nuestros artesanos si vemos quienes contribuyeron a su formación de una manera decisiva, porque la joven artista tuvo la oportunidad de educarse bajo la evocación de dos creadores que le inundaron la retina de líneas, colores, formas; amigos a los que vio en el vértigo de la creación e incluso a uno de ellos, José Manuel Roseñada, le sirvió de modelo; al otro, a Apolonio Reyes, incansable en su faena lo vio preparando sus grandes lienzos del Mausoleo, el parque de La Libertad, y el viejo puente construido por Leconte. Nunca comerció con el fruto de su talento natural, sencilla y austera sus agujas constantes no cesan. Sus tejidos y bordados se han expuesto como piezas curiosas, artísticas.
Una mirada retrospectiva nos enseña que la década de los 50 trae una hornada de creadores que se proyectan sobre la vida local con mayor profesión de obras de carácter comercial; estos artistas aunque extravagantemente viven de su labor. Además han realizado estudios por correspondencia o han entrado en relación con otros pintores populares del país propiciando el diálogo útil y provechoso.
De la generación de los 50 comienza destacándose Félix Ortiz Muñoz , quien trabaja y estudia simultáneamente desde 1940 hasta 1954 que se gradúa de la Escuela Elemental de artes y Oficios, Fundación del maestro Villate, en La Habana. Excelente dibujante, Félix Ortiz que firmaba sus cuadros F.O.Muñoz o Muñoz solamente, consolida su prestigio como dibujante comercial en La Habana y en Colón para después pasar de lleno a lo puramente artístico.
Su obra extensa en el retrato, paisaje y los diversos asuntos que se podían pintar de la vida nacionales símbolo de la perfección formal a la que se arriba con la constancia y el talento personal.
El desdén natural y la abulia de las autoridades no frenaron la imaginación del artista mulato que no limitó su arte a la experiencia vivida como retranquero junto a su padre en el central Álava.
Sus cuadros no son trasunto fiel de la pobreza y la crueldad bajo la que se vivía. Es una pintura alegre, plena, que se detiene en lo bello y bien ordenado del campo. Su quehacer continúa en la revolución hasta finales de los 80. Hizo propaganda gráfica y cuadros de héroes y mártires con la dignidad de Orlando Yanes.
Nacido el 1 de abril de 1937 Rolando Gómez García es la figura que permite retomar el hilo de las clases de dibujo en el Colegio Castillo donde aprende lecciones que después amplía en la Escuela de Artes y Oficios en dibujo técnico con volumen, perspectivas y proyecciones isométricas que le daban base para emplearla después. Envió también plumillas, según ganaba confianza, a El País Grafico donde publicó con éxitos. En el año 1975 da un vuelco definitivo a su carrera en el Taller Municipal de Artes Plásticas.
Con mucho dibujo, contraste de color, cuidado en los detalles ornamentales, rigor y seguridad al momento de plasmar el sitio elegido Rolando concibe sus acuarelas, con el viejo sueño de revivir –lleno de nostalgia- sitios que son también de la memoria y forman parte de su ámbito, a los cuales él les ha revelado a través de su oficio las peculiaridades de los motivos artísticos.
Las vistas de la ciudad de Rolando Gómez son una especie de inventario que ha realizado el artista sobre construcciones y monumentos, algunos en su estado original a la hora de trasladarlos a la cartulina y otros transformados por la acción del tiempo o de los hombres, que permanecen en la memoria de quien es un degustador de lo añejo, aunque venga en vasija nueva, pero con una mirada antitradicional, porque Rolando sabe que el pasado es una noción irreversible y que él no podrá detener la acción del tiempo, su lenta y persuasiva labor de erosión, pero se vuelve y rescata para la memoria colectiva de esos sitios y monumentos con sus detalles y motivos artísticos, constituyendo un homenaje a la ciudad, que lo ha visto trabajar duramente por varias décadas, y a la cual él inmortaliza en bellas acuarelas donde se enfatiza la majestad de lo pictórico, del oficio del artista.
Rolando no es un nostálgico, él vive, actúa, pinta, desde la perspectiva del presente, con los recursos de la actualidad, y su obra, en no poca medida lo demuestra. (Véase anexo # 2)
El más completo de los artistas colombinos irrupciona precisamente en la década del cincuenta. Como en ningún otro caso un creador nuestro forjó tan sólidamente sus instrumentos y alcanzó la formación intelectual y pictórica de José Miguel González Jiménez (1921), graduado de arquitecto a los 29 años de edad en la Universidad de la Habana. Desde los 2 años comenzó a dibujar, según recuerdan sus familiares. En la enseñanza primaria, flores y frutas en la intermedia, croquis, bocetos, estudios. Dos de las grandes líneas que aparecerán en su obra posterior como ilustrador de cerámica, naturaleza muerta y paisaje.
Como alumno aventajado de la Escuela de Artes y Oficios se relaciona con las artes industriales: albañilería, forja, carpintería, además se familiariza con la caladora, el relieve en yeso y el relleno de henequén. Tanta es su preocupación que trabaja y asimila en aquellas nociones que pueden servirle en el futuro. En el Colegio Colón continúa desarrollando su afición por el dibujo, materia para la que está especialmente dotado. Hacia 1969 inicia su gestión para entrar en la nómina del taller de Santiago de las Vegas adonde frecuentaba desde 17 años atrás. Consigue la plaza de decorador de piezas y se une a Rodríguez de la Cruz en un dueto de leyenda para la cerámica cubana. Las piezas salen de sus manos decoradas con motivos cubanos. No hay espacios con misterios para en esas superficies curvas y lisas para un dibujante como José Miguel, que consigue tonos de gran belleza, que realzan la excelencia del dibujo. Textura, brillantez y delicadeza del material son premisas del taller que el artista prestigia con su firma. Su entrada como ceramista no han hecho más que vivificar la tradicional calidad de piezas salidas de los hornos del taller y que firmaban las figuras de más rango en las artes plásticas en Cuba. (Véase anexo # 3)
En los años prerrevolucionarios no existió una infraestructura adecuada que propendiera al desarrollo del medio artístico, todo se debía a la gestión de algún comercio o institución que decidiera exponer a algún artesano o pintor con sus trabajos y de esta forma promover el valor local que luego estaba condenado a permanecer en el anonimato, la más de las veces, falto de recursos para perfeccionar su estilo.
El cultivo de la expresión artística sólo era posible a las élites, a aquellos que tenían las mejores condiciones económicas. Colón como la mayoría de los municipios de la isla no tuvo un movimiento de artistas coherente ni mucho menos, surgieron figuras aisladas que luchaban a brazo partido para sobrevivir en la adversidad. Nada de arte para el pueblo ni de instituciones culturales.
El cambio de las condiciones económicas y sociales a partir de la instauración del poder revolucionario el primero de enero de 1959 beneficia a las grandes masas que comienzan en mayor medida a entrar en contacto con las expresiones culturales.
Como nunca antes en la historia de Cuba, el cultivo de las artes y su disfrute toman un carácter masivo. La política cultural hizo posible que tempranamente en 1963 se expusieran unos grabados de Francisco de Goya, en coordinación con la Biblioteca Nacional, Los Caprichos es quizás la exposición de más hegemonía estética que se haya mostrado al público colombino.
El año 1965 es recordado como el momento en que se empieza a luchar por la creación de un taller, proyecto que se materializó en 1974. Fue una década interesantísima por el entusiasmo, por el deseo de estudio de todos, por las facilidades; la superación estaba a la orden del día. El artista ya no es la imagen del desamparo, ni su obra cosa de locos. El taller surgió para aficionados para que los aficionados adultos adquirieran técnicas, desarrollaran aptitudes y ocuparan su tiempo libre de forma útil e instructiva. Los salones regionales van mostrando una lía ascendente. En el organizado en 1974 llaman la atención algunos como Víctor M. Otero y Rafael Noda Bereijo, nuevos artistas que no vienen permeados de ciertos vicios de la propaganda comercial, este último participa en la exposición organizada en el 140 aniversario de la Fundación de la Ciudad, el prestigio alcanzado en la misma hace que una sus cuadros se envíen a la Galería Provincial donde recibe premio y las dos primeras menciones. Nacido el 20 de julio de 1946 en la localidad colombina, Felo como cariñosamente le llaman sus amigos, comienza a pintar en las paredes desde niño.
Los óleos de Felo destacan por su factura, la fuerza del color, riqueza del empaste, además de la inteligencia con que el artista elige la escena apropiada para plasmar en el lienzo, el cual como por arte de magia se anima de vida y pasa a ser un cuadro donde todo parece transcurrir sin contratiempos, donde la apacible vida bucólica fluye lenta y sabiamente. Aunque estos hallazgos no son nuevos o inventados por Felo en su concepción del paisaje como género, si apreciamos que él los remodela a gusto y antojo desde una perspectiva actual, merced a su estudio de la pintura y a su espíritu moderno.
En los óleos del pintor colombino no vemos el campo secular, atrasado, supersticioso, lleno de deformaciones y abusos que nos legaron ciertos pintores de escasa técnica preocupados por el cuadro social. No, en los paisajes de este artista las escenas del campo nos llegan de una forma que recuerdan Arcadia, se nos invita al retiro espiritual, donde todo es sosiego y descanso para las fatigas de la gran ciudad. Como pintor paisajista Felo no se detiene en pequeñísimos detalles, él trabaja de forma libre el conjunto, centrando la atención, a veces, en algunos de los componentes tradicionales del campo cubano. El pintor colombino estudia el conjunto de la obra y organiza agrupando por áreas los elementos por los que su plan es más vasto, complejo y de mayor alcance que el de otros de los artífices del género que se detienen en exceso en los detalles que nada aportan a la composición.
A nuestro creador lo que le interesa es el toque distintivo de entraña local, que en su proyección captura una profunda emoción, una pureza, un inefable sentimiento que inevitablemente se relacione con el entorno donde se desenvuelve su actividad cotidiana del pintor. Felo es un paisajista del campo y la ciudad, el tiende a guardar celosamente la memoria. Aquí es donde es más personal e íntimo en la plasmación de la luz y en los detalles que recrea por su conocimiento de la realidad retocada artísticamente.
Su formación como pintor empezó en el Taller Municipal de Artes Plásticas de Colón bajo la atenta dirección del instructor Cecilio Mursulí, a partir de 1974-1977. Después continúa su perfeccionamiento del oficio de una manera autodidacta. Ha tomado parte en importantes muestras de pintura (Véase anexo # 4)
Rafael Noda es fundamentalmente un cultivador del paisaje cubano y posee un reconocido prestigio en esta modalidad pictórica. Sus trabajos han sido solicitados por diversos organismos del Estado y clientes particulares. También algunas de sus obras han sido obsequiadas a personalidades del extranjero.
Otro de los artistas del municipio que se destaca por su labor es Julio Cesar Junco Rivera quien nace el 20 de julio de 1967, este es un pintor que se nutre de elementos de la actualidad, los valores en este creador se hayan en el tratamiento que él dispensa a estos temas. Graduado en 1990 en la especialidad de Artes Plásticas en el Instituto Enrique José Varona ha participado en diferentes exposiciones dando muestra de su valía como artista. (Véase anexo # 5)
José Antonio Zuaznábar Hernández es otro de los creadores de los últimos tiempos, nacido el 26 de febrero de 1967, ha dedicado su obra a motivos y detalles propios de las costumbres y la vida del cubano, trabajador incansable, que no es un trasgresor que en la evolución de su oficio hace tabula rasa del pasado. Es un hecho reconocido que el pasado no es un peso muerto sino que de alguna manera se revierte en el presente y se proyecta en el futuro. Ha participado en diversas exposiciones tanto personales como colectivas a lo largo de los años. (Véase anexo # 6)
Lázaro Zulueta Ortega nacido en Colón el 24 de agosto de 1970 es uno de los artistas de la plástica que ha participado en un gran número de exposiciones tanto colectivas. (Véase anexo # 7).
Osvaldo Almeyda García, nace en el municipio de Colón provincia de Matanzas, el 28 de Febrero de 1966, cursa sus estudios primarios y secundarios en la misma ciudad de Colón. Estudia en la escuela de formación de maestros primarios de la que se gradúa en el curso 1983-1984, luego cumple el servicio social en la provincia de Holguín en el plan especial de montañas del municipio de Sagua de Tánamo en dicha provincia, por un período de dos años. Terminado el cumplimiento del servicio social trabaja en la provincia de Matanzas como maestro terapeuta en una escuela de alumnos con trastornos de la conducta, posteriormente ingresa en el Instituto Pedagógico "Juan Marinello" en la especialidad de Educación Musical, curso dirigido para trabajadores simultaneando con su labor de docente en los centros "Coco Peredo", formadoras de maestros primarios y René Fraga Moreno de Matanzas también de Formadora de Maestros. Al graduarse en el año de 1993 de Licenciatura en Educación Musical continúa trabajando en dichos centros.
Desde pequeño se apreciaron en él aptitudes para la música participando en actividades pioneriles de base municipales, provinciales y nacionales, además, participa en diferentes festivales de la Federación Estudiantil de la Enseñanza Media (FEEM), también en festivales de la Nueva Trova, donde obtuvo mención especial.
Imparte clases de guitarra, dirección coral y técnica vocal a diferentes cursos emergentes para la formación de educadoras de círculos infantiles, ha impartido clases metodológicas y conferencias sobre música cubana y Apreciación musical en diferentes centros como promotor de la cultura cubana.
Sus inclinaciones por la pintura se hallaron muy vinculadas con los jóvenes egresados de la Escuela Nacional de Arte en la especialidad de artes plásticas que trabajaban en la misma escuela en la cual era docente también, momento oportuno para apreciar sus obras, sus estilos, los cuales lo marcaron e incentivaron a incursionar en la pintura como pasatiempo, sin rumbo fijo, sin objetivos ni aspiraciones, solo como una extraña manera de expresarse, a través de colores fuertes sin técnica alguna pero continua pintando de forma autodidacta, tratando de poco a poco incorporar texturas, ritmo, equilibrio, formas de elementos tan ajenos en sus obras primitivas que son imprescindibles para enriquecer las obras de artes.
De esta forma nace como artista plástico, busca de una vocación perdida navegando en este viaje de búsqueda incesante de experiencias, interrogantes, obstáculos, temores y prejuicios siendo sincero consigo mismo, despreciando vanidades para encontrar lo valedero en el acto de creación, conmovido de lo que hace con una gran carga de optimismo, sin dejar lugar a dudas sino transmitir soluciones válidas y alentadoras en los tiempos difíciles.
Acepta el reto de buscar incansablemente una forma propia de decir sin dejar de recurrir a temas polémicos de contenido reflexivo y humanista añadiéndole a la obra plástica melodías y canciones compuestas por él para fundamental el método visual con el auditivo, reforzando la imagen, para de está forma generar sensaciones, figuraciones, a través de una simbología que surgiere elementos para conformar una y historia.
Ese músico que lleva dentro, dejó escapar la musicalidad del caribe, con una concepción del mundo y una visión mítica del mismo, de la realidad atraída por nuestra identidad, lanzando su verdad de todos y donde indiscutiblemente todos debemos reflexionar. (Véase anexo # 8)
El 19 de febrero de 1961 nace en la ciudad de Colón, José Carlos González Soler, (Silí para los amigos y sobretodo para los admiradores de su arte), cursó estudios en la Escuela Nacional de Arte (ENA) donde se gradúa en el curso 1980-1981. Posteriormente se gradúa en el Instituto Superior de Arte (ISA) en la Habana como licenciado en Artes Plásticas, especialidad de pintura en el curso 1985-1986, comenzando a trabajar en la Galería de Arte Provincial de Matanzas como Promotor y Programador en la provincia. Desde entonces ha convertido su oficio deslumbrador en pasión, torrente, razón de ser.
Este es el más significativo de los pintores de la ciudad de Colón, su obra, que en varias ocasiones ha tenido asiento y difusión en muestras personales y colectivas en la Galería Municipal y en el Salón Manuel Mantilla ha sido ganadora en diversas ocasiones.(Véase anexo # 9)
José Carlos se sirve de la naturaleza, su pintura parte de ella y en su primer plano aparecen grandes figuras humanas en una perspectiva que desbarata toda la idea tradicional, porque sitúa sus figuras en poses que no son fácil, modelado de siempre que se estudia en las academias.
El pintor tiende a lo vasto y difícil y su obra se estructura para vencer las complejidades que surgen de la propia composición del cuadro. Tuerce sus figuras se basa en la línea ondulada, en el dinamismo del colorido, en lo atrevido del tema que exige de nosotros una reflexión.
El tema del sexo no es nuevo en las artes plásticas y silí lo retoma para estructurar su discurso, que nos viene como un soplo de aire fresco, por el tono desenfadado con que trabaja la pintura en esos lienzos que no deforman la belleza del cuerpo humano, al contrario, la exaltan, la defienden, la elevan. José Carlos es un poeta de la belleza, sus cuadros le dan esa definición, y no hay nada aleatorio en esto, sino que es el resultado a que arriba el artista consagrado por medio de su inteligencia, talento e intuición.
La obra de silí nos proyecta a un mundo artístico que libre de prejuicios y con la mayor andancia, solidez y encomio, presenta el contacto más grácil y sugestivo de interrelación del ser humano con su entorno general, lográndose esto a través de códigos, preceptos y formas de hacer muy particulares y sobresalientes, siempre a partir del extenso lenguaje a recurrir la inagotable fuente en que se convierte e arte universal.
Se percibe con la obra de Silí una pintura figurativa por excelencia donde están muy bien definidos sus contornos que se tornan precisos y claros, destacando la volumetría palpable de los cuerpos y donde cada uno ocupa su espacio bien delimitado, articulándose ellos con suficiente coherencia y proporcionalidad: hábil el artista en su ejecución, rompe este principio sólo cuando quiere destacar ciertos elementos que para él requieren la atención del espectador, o bien cuando lo utiliza en función de un efecto visual simbólico. Esos mismos elementos pictóricos cubren a plenitud el marco de la composición, quedando a veces truncas las imágenes representadas, recurso utilizado por el autor con la finalidad de sugerir la "inmensidad" de las dimensiones de los cuerpos, o simplemente causar en el consumidor de la obra, la sensación de estar observando grandes detalles de algo y así disfrutar a plenitud la particularidad del todo.
Por lo general cada lienzo se destaca por una utilización homogénea del color, sin grandes contrastes, en unos predominan los tonos fríos ¿negros, grises y azules?, en yuxtaposición con otros más claros (rosas ámbares, opalinos y sienes ), aunque se ve también la aplicación de una policromía mucho más viva y contraste, que va desde el blanco, amarillo y naranja hasta el azul, esta se pone de manifiesto en la serie de pinturas que abordan el tema de los cultos sincréticos en Cuba. Para Silí la pintura es un medio de expresar la verdad con originalidad. Su obra así lo acredita. Su pintura de cierta huella academicista, posee un fuerte poder expresivo en el uso del color que provoca y sugiere, así como en las pinceladas que parecen llevarnos de la mano a encrucijadas de sensaciones insospechadas.
Sus proyectos de ambientación trascienden muestran fronteras atestiguan su talento en hoteles y clubes del balneario de Varadero, el más visitado por el turismo internacional. Varios de sus cuadros se encuentran formando parte de colecciones particulares en otros países. De las paredes de la Casa Simón Bolívar, cuelga un retrato del Libertador que lleva la firma de Silí, uno de los más significativos artistas del municipio, cuya obra asombrosa y humana ya pertenece a la historia de Colón y desafiará el tiempo con su exitoso afán de atrapar la luz y el color de lo eterno.
En los más de cien años de actividad de la plástica en Colón no se conoce ningún caso particular en el que el obrero del arte estuviera presionado por alguien al momento de enfrentar su obra, cuando decidió aceptar un encargo lo hizo por deseos de trabajar o por necesidad material, o por ambas cosas.
Se puede afirmar, después de haber realizado una ardua tarea en la búsqueda de información, hurgando aquí y allá, buscando entre papeles viejos y otros no tan nuevos esparcidos en diferentes lugares del territorio con el fin de lograr una investigación lo más precisa posible; que la llanura colombina, rica en dones naturales y en las virtudes de sus pobladores, no es una potencia del buen arte pictórico como tradicionalmente se considera a la región central del país o Santiago de Cuba. En la investigación se muestra con orgullo el nombre de un grupo de creadores que aunque no constituyen un movimiento, por el modo en que se vivía en Cuba antes del triunfo revolucionario, si sobresalen como figuras de la plástica quienes fueron reconocidos y recompensadas en el período revolucionario y que tendrían un lugar cimero garantizado en una posible historia de las artes en la provincia matancera.
A los artistas y artesanos de los duros tiempos republicanos les faltó el apoyo oficial y paternidad, infraestructura y comprensión de su labor. El creador en la Revolución dispone de los medios necesarios para formarse como un profesional de las artes plásticas. De su parte sólo corresponde la conciencia, el talento y el arduo trabajo del día a día para perfeccionar su técnica.
Los frutos de esa innegable cantera se divisan a simple vista en cada evento que se celebra ya sea municipal, provincial o nacional, donde los jóvenes y otros no tan jóvenes, quienes ya peinan canas son reconocidos por el valor de su obra, por el talento con que expresan sus sueños e ilusiones. El quehacer de la plástica colombina continúa ahora con más ímpetu gracias a la labor desempeñada por los integrantes de la brigada José Martí quienes llevan el conocimiento a los niños de cada escuela primaria, a los adolescentes y jóvenes de cada secundaria básica y preuniversitario del municipio, quienes con su empeño y entusiasmo logran que día a día haya un relevo seguro para las artes plásticas en la llanura.
Conclusiones
La aplicación de los métodos científicos histórico lógico e historia de vida, permite demostrar que no fue hasta el año 1959 que se logra darle un impulso de las artes plásticas con la creación del Taller de Artes Plásticas, y de la Galería de Arte Universal que hoy lleva el nombre del arquitecto y ceramista colombino José Miguel González. Aunque en las etapas históricas anteriores brillaron figuras como Manuel Mantilla, José Manuel Roseñada, Apolunio Reyes y otros quienes desarrollaron su obra creativa a base de talento y sacrificio personal, por no contar con el apoyo estatal.
Algo distintivo de los artistas de la plástica local es que incursionaron en varias técnicas pictóricas (pintura, dibujo, grabado, cerámica, etc.), demostrando así sus inquietudes artísticas, versatilidad y valor para enfrentar la crítica profesional y de los espectadores. Destaca además la variedad temática de las obras, que van desde el retrato, el paisaje hasta el abstraccionismo. Los creadores actuales como hombres de su tiempo se nutren del postmodernismo en la búsqueda constante de nuevas formas expresivas.
En general, cada uno de ellos, en su momento histórico, aportó al proceso de formación de identidad cultural, local y nacional, en la que se entremezclan el hombre común, la producción azucarera, los conflictos humanos, el verdor del paisaje rural y las construcciones patrimoniales que nos identifican ante el resto de Cuba.
Recomendaciones
Sugerir a los profesores colombinos que imparten la asignatura de Educación Plástica, que consulten esta investigación para que sus alumnos profundicen sus conocimientos de la vida y obra de los creadores locales en esta manifestación cultural.
Bibliografía
Fuentes bibliográficas.
Batlle, Jorge Sergio. José Martí. Aforismos. Centro de Estudios Martianos. La Habana, 2004.
Centro de Documentación. Galería de Arte José Miguel González de Colón: Dosier de Artistas Plásticos de Colón.
Fuentes documentales.
Centro de Documentación. Galería de Arte José Miguel González de Colón: Dosier de Artistas Plásticos de Colón.
Registro del Estado Civil de Colón:
1. Sección de nacimientos:
Sección de nacimientos:
1. Gómez García, Rolando. Tomo Folio
2. Gonzáles Soler, José Carlos. Tomo Folio
3. Junco Rivera, Julio Cesar. Tomo Folio
4. Noda Bereijo, Rafael. Tomo Folio.
5. Reyes, Apolonio. Tomo Folio
6. Zuasnábar Hernández, José Antonio. Tomo Folio
7. Zulueta Ortega, Lázaro. Tomo Folio
Fuentes Orales
Capote Peón, Roberto. Entrevista. Colón, 8 de julio de 2009; 14 de agosto de 2009; 11 y 16 de septiembre de 2009. Entrevistó: Katia Ortega Díaz.
Noda Bereijo, Rafael. Entrevista. Colón, 12 de septiembre de 2009. Entrevistó: Katia Ortega Díaz.
Ojeda García, Samuel. Entrevista. Colón, 20 de septiembre de 2009. Entrevistó: Katia Ortega Díaz.
Anexos
Anexos # 1
Manuel Mantilla Béjar.
Anexos # 2
Rolando Gómez García.
Estudios cursados.
Círculo de Bellas Artes.-Habana 60-62
Escuela de Artes Plásticas-Colón 11/80
Imprenta y encuadernación-Colón 52-55
Exposiciones colectivas.
El arte un arma de la Revolución. Galería de Arte Colón. 1983 y 1984.
Salón del paisaje. Galería de Arte Matanzas. 1986 y 1990.
Semana de la Cultura. Biblioteca Municipal. Colón. 1990.
Salón Municipal Artes Plásticas Colón. 1991.
Semana de la Cultura. Biblioteca Municipal. Colón. 1992.
Solares Manuel Mantilla Béjar, 1993, 1994 y 1996.
Exposición con Brigada Hermanos Saíz. 2000.
Exposiciones personales.
ECAVECO-Habana- Festival Juventud y los estudiantes. Argelia. 1963.
ECAVECO-Habana. 1964.
Animalia- Galería de Arte Universal. 1987.
Figuras. Casa de Cultura. Colón. 1990.
Siluetas y formas. Galería de Arte Los Arabos. 1991
La obra de Rolando Gómez. Biblioteca Municipal Colón. 1993.
Apuntes de un viajero. Galería de Arte Colón. 1994.
Juegos de agua. (acuarela tempera) 1999.
Hospital San Fernando. Muestra del mes Museo Municipal, Colón. 2000.
Acuarelas sobre el Moncada. Casa de los mártires del Moncada. Colón. 2000.
Anexos # 3
José Miguel González.
Exposiciones colectivas.
Gouaches tintas dibujos. Lyceum Law Tennis. La Habana. 13-25 julio 1959
Arte y Artesanías cubanas. Lyceum Law Tennis. La Habana 15-26 octubre 1959
Feria de Artes plásticas por el I Congreso Nacional de Escritores y Artistas. Palacio de Bellas Artes. 1961.
Cerámica artística Casa de Cultura de Santiago de las Vegas. 1981
Cerámica. Galería 12 y 23. 1982.
Retrospectiva de Cerámica. Galería Amelia Peláez del Parque Lenin. 1982.
I Feria Nacional de Cerámica. Isla de la Juventud. 1982.
II Feria Nacional de Cerámica. Isla de la Juventud. 1983.
Cerámica artística. Expo permanente. Museo Nacional de la Cerámica 1990
I, III, IV Salón "Manuel Mantilla Béjar". Galería de Arte. Colón, 1991, 1994,
1996
Muestra Patrimonial de Cerámica al XLVIII Rassegna Internazionale d" Arte. Pazzo expretura, Sassoferrato, Italia 1998
Variaciones sobre lo natural ( dedicada al Día Mundial del Medio Ambiente ). Museo Nacional de la Cerámica. 1999
Décimo Aniversario del Museo de la Cerámica. Galería "René Portocarrero". Sala Cobarrubias. Teatro Nacional 2000
Maestros de los años 50 y 60 ( pintura ). Galería UNEAC Provincial Matanzas 2000
Exposiciones personales.
Cerámica y pintura. Museo Histórico "José Ramón Zulueta". Colón. 1983
Cerámica decorativa- utilitaria. Galería de Arte Universal. Colón. Agosto 1987
Cerámica. Galería de Arte Universal. Colón, 1988
Cerámica. Casa de los Mártires del Moncada. Colón, 1989
Sala Permanente de Cerámica. Galería de Arte. Colón, 1989
Expo antológica: 70 aniversario. Galería de Arte. Colón, 1991
Acuarelas. Galería de Arte. Colón, 1994
Cerámica artística de Cuba. Galería Provincial de Arte. Matanzas, 1996
75 cumpleaños. Galería de Arte. Colón, 1996
La cerámica en la arquitectura colonial ( acuarelas ). Galería de Arte. Colón 1997
Acuarelas Biblioteca " Juan Marinello". Colón 2000
En armonía con la naturaleza. Museo Nacional de la Cerámica. 2000
José Miguel González en sus 80 cumpleaños. Memorial José Martí. 2001-09-24
Cerámica. Museo de Artes Decorativas. Matanzas. Junio 2002.
Cerámicas. Galería de arte de Varadero. 2002
Anexo # 4.
Rafael Noda Bereijo.
Ha tomado parte en importantes muestras de pinturas colectivas como el Evento Internacional de Artistas Aficionados en la RDA (1979).
Exposición Nacional de pintores aficionados auspiciado por la CTC, donde resultó de los autores premiados (1979)
Ha participado en salones de la ciudad "Manuel Mantilla Béjar" en sus cuatro ediciones, alcanzando premios y menciones, destacándose en el del año 1996, correspondiente al 150 aniversario de la ciudad.
Exposiciones suyas se han organizado de forma individual en los municipios, de Calimete, Perico, Los Arabos, Martí, Jovellanos, Colón y otros. Además de haber expuesto en varias ocasiones en el salón provincial.
Paisajes de Rafael Noda 13-7-92 al 26-7-92.
Pinturas de Rafael Noda. 3-12-99 al 3-1-00.
El dadivinoso paisaje en la memoria. Galería Colón. 8-1-05 al 12-2-05.
Anexo # 5.
Julio Cesar Junco Rivera.
Exposiciones colectivas.
Exposiciones Colectivas
Lecturas Mínimas. Galería de Arte. Colón.2006
Mural Colectivo "Misión Amanecer" en Jagüey Grande.2005
Salón Nacional de Instructores de Arte. La Habana.2005
Salón Provincial de Instructores de Artes. Matanzas.2005
IV Salón Provincial de la Madera. Galería, Colón.2005
Salón Manuel Mantilla. Galería de Arte. Colón.2004
Mural Colectivo. Feria del Libro.2004
Expo XIII Salón Roberto Diago.2004
Salón Provincial de Instructores de Arte.2004
Un solitario que mira de frente y se abanica con las palmas. Galería Colón.2003
150 cartulinas a Martí.2003
Tribuna Abierta. Los Arabos . Mural Colectivo.2002
Salón Provincial de Instructores. Matanzas.2002
Expo. Galería de Jovellanos.2002
Expo. Galería de Perico.2002
Saló de la madera. Galería de Colón.2002
VI Salón Municipal "Manuel Mantilla Béjar". Galería de Arte. Colón. 2002
Salón Décima Mural. Museo Municipal. Colón.2001
Salón Manuel Mantilla. Galería de Arte. Colón.2000
Salón Décima Mural. Museo Municipal. Colón.2000
Expo extensiva AHS. Galería Los Arabos1999
Salón de Paisaje. Galería de Arte. Colón.1999
Salón AHS. Museo Municipal. Colón.1999
Salón AHS. Museo Municipal. Colón.1998
Salón Manuel Mantilla. Galería de Arte. Colón.1998
Salón Manuel Mantilla. Galería de Arte. Colón.1996
Salón Manuel Mantilla. Galería de Arte. Colón.1994
Salón Manuel Mantilla. Galería de Arte. Colón.1992
Expo Museo Nacional de Bellas Artes. Escuela de Formación Artística. C. Hab.1986
Expo de Estudiantes de Educación Artística. Casa Estudiantil ISP. 1985
Exposiciones personales.
Expo. Casa de Cultura Banagüises. 2005
Expo Los niños tienen suerte. Los Arabos.2005
Las doce vueltas. Galería de Arte. Colón.2004
Expo Los niños tienen suerte. Jovellanos.2004
Expo. Casa de Cultura de Banagüises. Colón.2002
Expo. Oficina del Historiador. Colón.2002
Expo. Casa de Cultura de Banagüises.2001
Expo. Oficina del Historiador. Colón.1999
Expo. Casa de Cultura. Calimete.1999
Expo. Galería de Arte. Los Arabos.1996
Expo. Galería de Arte. Colón. 1995
Anexo # 6.
José Antonio Zuaznábar Hernández
Exposiciones colectivas.
Salón Jorge Arche. Municipio los Arabos. 1989, 1990, 1991, 1992.
Salón Instructores de Arte. 1989, 1990, 1991, 1992.
Rompiendo cadenas. Galería de Colón. 9-12-1995 al 31-12-1995.
Salón de la cubana AHS. Colón.
Exposiciones personales.
Movimientos. 1991.
Guajirito Soy. 30-10-1993 al 20-11-1993.
Luces del alma. 30-7-2004 al 31-7-2004.
Premios.
Mención Jornada Cucalambeana, Casa Naborí, Limonar. 1990.
Mención Salón Jorge Arche. 1991.
Segundo premio Salón Jorge Arche. 1995.
Anexo # 7.
Lázaro Zulueta Ortega.
Exposiciones colectivas.
Salón Territorial "Manuel Mantilla". Galería de Colón, 1991.
Salón Territorial "Manuel Mantilla". Galería de Colón, 1992.
Salón Territorial "Manuel Mantilla". Galería de Colón, 1994.
Tres Ceramistas Exponen. Galería de Colón, 1994.
Salón Territorial "Manuel Mantilla". Galería de Colón, 1996.
Expo CERVAR, Hotel Meliá. Varadero. Cuba, 1996.
FIART. La Habana. Cuba, 1997.
Expo- Galería Carmen Montilla. La Habana. Cuba, 1997.
Expo-Caribe, Plaza Concordia. Panamá, 1997.
Expo-Caribe, Instituto de Cultura. Panamá, 1997.
Expo-Caribe, Galería Hershingel. Panamá, 1997.
Expo-Caribe, Hotel Caribe. Panamá, 1997.
Salón "Roberto Diago". Matanzas. Cuba, 1998.
Salón Provincial "Roberto Diago". Matanzas, 1999.
Salón de la UNEAC. Internacional de Varadero, 1999.
Salón Municipal "Manuel Mantilla". Galería de Colón, 2000.
Exp. Taller de Cerámica de Varadero. Castillo de la Real Fuerza. Ciudad Habana. Cuba. 2001.
II Trienal Internacional de Tile Cerámico (azulejo) 2002.
Museo de Arte Moderno, Santo Domingo, Republica Domicana
Expo Colectiva Carilda Oliver Labra. Melia Vardero 2002.
VI Salón "Manuel Mantilla Béjar". Galería de Arte. Colón. Agosto 2002. Obra: Sexy pero cabra.
Bienal de La Habana Galería Nelson Domínguez 2003.
Expo Colectiva "Museo Varadero 2004.
Expo Colectiva. Montreal, Canadá. Galería Gora 2004.
VII Bienal de Cerámica Amelia Pelaez. Salón Blanco. Convento de San Francisco de Asis. Habana Vieja 2004.
Exposición colectiva "Artistas Colombinos Exponen".
Municipio Perico. 2004
Luces del alma"Municipio de los Arabos.2005
Salón: Jorge Archie, Municipio de los Arabos. 2005.
Salón "Puro Arte", Pasión por la artesanía, Matanzas. 2005.
VIII Bienal de Cerámica Amelia Pelaez. Convento de San Francisco de Asis 2006.
Expo Colectiva Galería Sol y Mar Varadero 2006.
Expo Colectiva de Cerámica Cienfuegos, Cuba 2006.
Expo Colectiva. Galería Los Arabos. 2006.
Premios y Menciones Obtenidas.
Premio ASH Salón Territorial "Manuel Mantilla Bejar .Galería Colon. 2004
Mejor Décima Mural del Concurso Décima Mural
De la 30 de la semana en Cultura en Colon.2004
Segundo premio Concurso Provincial "MI canto a
Carilda. (Décima Mural) 2004 .
Premio Jornada Cucalambeana Municipal.2003
Premio de Jornada Cucalambeana Municipal.2002
Segundo premio de Jornada Cucalambeana Provincial .Casa Naborí.2002
Premio Concurso Cátedra martiana de la Escuela Superior del Partido "Nico López.1998
Segundo Premio Salón Jorge Arche. Los Arabos.1995
Mención Salón Jorge Arche. Los Arabos.1991
Mención Jornada Cucalambeana provincial. Casa Naborí. 1990
Primer Lugar en Festival Nacional de la OPJM. 1979
Anexo # 8.
Osvaldo Almeyda García,
Exposiciones colectivas.
VIII Salón Territorial "Manuel Mantilla Béjar". Galería de Arte. JMG. Colón. 2006
VII Salón "Manuel Mantilla Béjar". Galería de Arte. Colón 2004
Galería de Arte. Colón. 2004
Galería Pedro Esquerré. Matanzas.2003
VI Salón "Manuel Mantilla Béjar". Galería de Arte. Colón. Agosto. Obra: Corazones mojados.2002
WorK of Art Gallery. Miami. 2002
Expo "Asir la luz". Hotel Tryp Península, Varadero. 2002
Expo "Artistas de la Ciudad". Galería de Arte. Colón.2002
Exposición colectiva en la Galería de Colón 2002
Expo "Vestida de desnudez". Galería "Uver Soler". Jovellanos. Marzo.2002
Galería de Arte. Colón. 2001
Exposiciones personales.
Apuntes para una historia. Galería de Jovellanos. 2007
Apuntes para una historia. Galería de Arte JMG. 2006
La Romana. Republica Dominicana.2005
Altos de Chavón. Republica Dominicana. 2005
Almeyda en concierto. Galería de Jovellanos. 2004
Almeyda en concierto. Galería de Arte. Colón. 2004
Entre mamparas. Galería de Arte Sol y Mar. Varadero. Julio 2003
Ese músico que anda por ahí. Galería de Arte. Abril 2003.
Génesis II. Biblioteca municipal. Colón. 12 Abril 2003.
Work Of Gallery Miami. EUA. 2002. Obra: "Cuba de aquí y de allá" 2002
Galería de Los Arabos 2002. Obra: "Colach". 2002
Galería de Jovellanos 2002. Obra: "Vestida de desnudez" 2002
Galería de Perico. 2002.
Salón Municipal "Jorge Arche". Los Arabos. 2002. Obra: "Génesis". 2002
Exposición personal en la Galería de Arte de Colón. 2000. Obra: "Que no mueran tus sueños"
Exposición personal en la casa del Historiador de la Ciudad de Colón.1999
Anexo # 9.
José Carlos González Soler,
Exposiciones colectivas.
Artistas colombinos. Galería de Arte. Colón. Matanzas. 1984.
Composición. Casa de Cultura. Colón. Matanzas. 1986
Salón Manuel Mantilla. Galería de Arte. Colón. Matanzas.1990.
Salón Manuel Mantilla. Galería de Arte. Colón. Matanzas.1991.
Salón Manuel Mantilla. Galería de Arte. Colón. Matanzas.1992.
Exposición. De Matanzas te traigo un regalo. Centro de Artes Visuales, Matanzas. 1992.
Hotel Meliá Fondo Bienes Culturales, Varadero, Matanzas.1992.
Por el tricentenario de la Ciudad. Centro de Artes Visuales, Matanzas. 1993.
Premios del Salón Manuel Mantilla. Casa de Cultura. Colón. Matanzas.1994.
Artistas Matanceros. Galería de Antigüedades. Varadero. Matanzas. 1994.
Salón de la UNEAC en el Hotel Internacional de Varadero. Matanzas. 1997.
Salón Provincial Roberto Diago. Matanzas. 1998.
Exposición Artistas Matanceros. UNEAC. Matanzas. 1998.
Expo Asociación Hermanos Saíz. Museo Municipal, Colón. Matanzas. 1998.
Expo Asociación Hermanos Saíz. Museo Municipal, Colón. Matanzas. 1999.
Identidades Salón UNEAC Provincia Matanzas. 1999.
Identidades Salón. Galería de Arte. Colón. 1999.
Expo Asociación Hermanos Saíz. Casa del Historiador. Colón. 2000.
Salón Manuel Mantilla. Galería de Arte. Colón. 2000.
Exposiciones personales.
Composición 1. Galería de Arte. Colón. Matanzas. 1984.
Composición 1 y 2. Galería de Arte. Colón. Matanzas. 1985.
Mitos. Galería de Arte Servando Cabrera, Habana. 1986.
Cruzadas antropomorfas. Casa de Cultura. Colón. Matanzas. 1993.
Homenaje a mis visiones. Galería de Arte Colón. 1994.
Mis visiones. Fondos de Bienes Culturales. Matanzas. 1994.
Cruzada impúdica. Galería de Arte. Colón. Matanzas. 1995.
Autor:
Lic. Katia Ortega Díaz
SUM Colón
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